El pasado 18 de marzo, el sector de la recepción del primer piso del Centro de Salud El Aguilucho se incendió. Cerca de 50 personas debieron ser evacuadas en un operativo que tomó apenas dos minutos.
El incendio no fue de verdad, sino parte de un simulacro de emergencia coordinado por el Comité Paritario de Higiene y Seguridad (CPHS) del centro de salud, apoyado por la administración central de la Corporación de Desarrollo Social (CDS).
El objetivo fue detectar las buenas y malas prácticas frente a un imprevisto. Según Bianca Mendoza, presidenta del CPHS: "Los simulacros tienen gran importancia para conseguir una buena organización en situaciones de emergencia y por sobre todo, para prevenir accidentes y lograr detectar los puntos críticos en un proceso de evacuación".
De este modo, cerca de 50 personas, entre funcionarios(as) y usuarios(as) del recinto siguieron las instrucciones del comité de emergencia, liderado en esta ocasión, por la directora del CESFAM, Carla Herrera.
Tal como informó el jefe del departamento del Departamento del Departamento de Prevención de Riesgos de la CDS, Fernando Quezada, los puntos débiles detectados durante el ejercicio serán tratados en la reunión del Comité durante el mes de abril.